R30 – Castellón – Sant Joan de Penyagolosa
Ruta
Descripción de la ruta
Te proponemos una ruta de alta dificultad diseñada para los ciclistas más expertos. Con más de 3.600 m de desnivel, esta ruta dura y escapada es similar al recorrido del Gran Premio Peñagolosa de la “Volta Castelló”. Si estás preparado, 152 km de retos te aguardan, llevándote hacia el Parque Natural del Peñagolosa, atravesando la parte noreste del Parque Natural de la Sierra de Espadán.
La ruta comienza en Castellón, tomando la carretera de Ribesalbes, que te llevará hasta el Embalse de Sichar, rodeándolo por el norte en una carretera accidentada pero sin pendientes extremas. Al llegar a Ribesalbes, la carretera se vuelve más quebrada y empinada. Siguiendo la CV20, pasarás cerca de pueblos como Fanzara y Vallat, entre frondosos bosques. En Toga, disfrutarás de un tramo llano donde podrás recuperarte antes de tomar la CV198 hacia Ludiente.
Desde Ludiente, comenzará uno de los puertos más duros de la ruta, catalogado de primera categoría, con 980 m de altitud. Continuarás hacia el Puerto del Remolcador, pasando cerca de Castillo de Villamalefa en una carretera rodeada de bosques de encinas, lo que suaviza el final de la subida. Tras coronar, disfrutarás de 15 km de bajada hasta Lucena del Cid, siguiendo el río hasta llegar a Figueroles, donde comenzarás un tramo más escarpado e irregular.
Antes de enfrentarte a los dos últimos duros puertos, atravesarás Atzeneta, donde empezarás a subir el puerto de El Vidre, con grandes pendientes. Tras un breve tramo favorable, te espera el último reto: el puerto de Vistabella, donde alcanzarás la altitud máxima de 1249 m. La ruta termina en el corazón del Parque Natural del Peñagolosa, completando este épico recorrido, similar a la meta de la Volta Castelló.
Puntos de interés de la ruta
Castellón de la Plana (Km 0): punto de partida de la ruta. Capital de la provincia de Castellón que cuenta con más de 170.000 habitantes y un gran patrimonio tanto civil y religioso como natural.
Embalse de Sichar (Km 19,9 – 30,1): situado en el término municipal de Onda en el cauce del río Mijares.
Ribesalbes (Km 28): una pequeña pedanía de Onda con poco más de 1.000 habitantes situada junto al Embalse de Sichar.
Toga (Km 49,6): pueblo de menos de 100 habitantes situado entre dos grandes montañas: la Sierra de Espadán y el macizo del Peñagolosa
Ludiente (Km 61,4): pequeño municipio ubicado en un valle rodeado de grandes montañas, lo que hace de su paisaje algo único. Conserva dos castillos y una torre datados de la época medieval.
Lucena del Cid (Km 84,6): más conocida como la Perla de la Montaña, se sitúa en barranco de la Pedreñera, lo que hace que destaque su gran desnivel. Cuenta con la ermita-castillo de San Miguel de les Torrecelles, actual estación de los peregrinos de Useras.
Iglesia de San Mateo, Figueroles (Km 91,6): catalogado como bien de relevancia local construida en el siglo XVII bajo los cánones renacentistas. En su interior alberga retablos datados del mismo siglo.
Iglesia parroquial San Bartolomé – Atzeneta (Km 117,1): forma parte de las antiguas murallas medievales que protegían el territorio. Después de ser una prisión hasta los años 60 actualmente es ‘Centro de Interpretación de la Historia de Atzeneta del Maestrat’.
Castellón de la Plana, capital de la provincia, está ubicada entre las sierras y el mar Mediterráneo, y cuenta con más de 170,000 habitantes. Fundada en 1253, la ciudad se trasladó del Cerro de la Magdalena a la Plana, lo que inspiró las famosas Fiestas de la Magdalena. A lo largo de su historia, Castellón ha pasado de ser una ciudad agrícola a una ciudad de servicios. Su origen se remonta al Neolítico, con restos arqueológicos en el Desierto de las Palmas, aunque la mayor parte de su historia está marcada por la influencia romana y musulmana. En la Guerra de la Independencia, Castellón fue sitiada y, más tarde, en el siglo XIX, creció gracias al cultivo de cítricos y la exportación. En este período se derribaron antiguas estructuras para expandir la ciudad.
Hoy, Castellón ofrece una mezcla de patrimonio histórico y naturaleza. Entre los monumentos destacan la Catedral de Santa María, el Fadrí (campanario gótico) y la Basílica de Nuestra Señora de Lledó. Además, el Desierto de las Palmas y las islas Columbretes son atractivos naturales clave. En el centro, el Palacio Episcopal y la Lonja del Cáñamo completan la oferta cultural.
La gastronomía de Castellón es conocida por sus arroces, y puedes probar el arroz a banda en el Restaurante Mediterráneo o disfrutar de mariscos frescos en la Tasca el Puerto. En cuanto a alojamiento, hay opciones como el Hotel Luz Castellón, cerca de la estación de tren, el NH Castellón Turcosa en el puerto, o el Hotel del Golf Playa, con vistas al mar, ideal para familias.
Catedral de Santa María: iniciada en el siglo XIII, fue derruida en 1936 y no fue reconstruida a partir de 1940 bajo las premisas neogóticas.
Palacio Episcopal: su construcción empieza en el siglo XVIII por orden del obispo bajo el estilo neoclasicista.
Basílica de Nuestra Señora Lledó: datada del siglo XVIII, construida sobre antiguos templos bajo las normas del estilo barroco.
El Fadrí: un campanario situado frente a la Catedral Santa María separado de esta con un estilo gótico valenciano.
Lonja del Cáñamo: edificio barroco del siglo XVIII que actualmente funciona como centro cultural.
Hotel Luz Castellón (calle Pintor Oliet, 3): hotel con modernas instalaciones y decoración situado junto a la estación de trenes.
NH Castellón Turcosa (Treballadors de la mar, 1): precio accesible a un hotel de tres estrellas con vistas al puerto de Castellón.
Hotel del Golf Playa (Avenida golf, 2): situado frente a la playa. Ideal para viajar con familia.